Cristian Moreno ha demostrado ser un candidato que mide los tiempos muy bien; esta vez lo volvió a hacer con un multitudinario evento en la comuna cuatro, ratificando su fortaleza en los sectores populares de la ciudad.
En un momento en el que Orozco se rodea de la clase política vallenata, Cristian José Moreno apuesta a las bases populares, desarrollando un trabajo político casa por casa, un trabajo silencioso pero muy efectivo que garantiza una movilización eficaz y consolida su proyecto como una opción real de triunfo, alejándose de los políticos tradicionales que actualmente gobiernan la ciudad.
Cristian José se ha volcado a los barrios con propuestas claras y un discurso frontal contra la administración que, paradójicamente, hoy se ha cerrado con Ernesto Orozco, sí, el mismo que en las pasadas elecciones fue vencido por El Mello Castro. Hoy, debido a las dinámicas de la política vallenata, ha terminado aliándose con el candidato de Ape Cuello, que ahora es socio del Mello Castro y el nuevo mejor amigo de Orozco.
Estos movimientos han resonado entre los votantes y demuestran la negoción que hay detrás. El rechazo a la gestión del Mello Castro en los barrios de Valledupar es evidente; los vallenatos todavía esperan el orden prometido, que nunca llegó. Sin embargo, lo que sí llegó fue la inseguridad, la pobreza y el olvido, lo que hace que esta movida de Orozco para obtener el apoyo del Mello traiga consigo una factura enorme que hoy le están pasando con un costo significativo para su campaña.
La lucha por la alcaldía de Valledupar está al rojo vivo; el respaldo de los barrios populares aumenta, mientras Ernesto se atrinchera rodeado de poderosos empresarios y políticos. Cristian Moreno sigue recorriendo sin parar los barrios de Valledupar.
No olvidemos que en Valledupar, los electores castigan, y esta movida electoral del alcalde no ha pasado desapercibida; desmontar a su candidato para luego alinear la administración a su antiguo contendiente no ha gustado ni entre las mismas bases, ni entre los funcionarios de la alcaldía. Está claro que hay heridas que no han sanado, y parece que al alcalde de Valledupar no le importa.
La campaña de Moreno sigue creciendo, y ya se ha vuelto costumbre que cuando dicen que la ola morada se estanca, de la nada el impetuoso Cristian Moreno termina moviéndose como pez en el agua para decir: Tranquilos, aquí estoy yo, seguiremos en la esquina viendo la movida.
